VIZCACHA

Lagostomus maximus

Distribución

Habita el sudeste de Bolivia,3 el oeste del Paraguay, y el norte y centro de la Argentina hasta el norte de la Patagonia.A comienzos del siglo XX fue introducida en el oeste del Uruguay, donde nunca habitó naturalmente, pues las poblaciones de Entre Ríos eran detenidas por el infranqueable río Uruguay. La especie pronto logró expandirse en el nuevo y propicio hábitat, pero una rápida reacción gubernamental logró eliminarla por completo, siendo este un caso testigo a nivel mundial en la lucha contra las especies introducidas, pues es muy poco frecuente que los planes de control se hagan a tiempo y forma, o que resulten efectivos.Fue declarada por el Ministerio de Agricultura de Argentina plaga de la agricultura en 1907, y por ley nacional su control es obligatorio, lo cual, llevó a una regresión poblacional en gran parte de Argentina, amén de sufrir frecuentes extinciones locales de manera natural, incluso en parques nacionales, por ejemplo en el parque nacional El Palmar, o en el parque nacional Lihué Calel.

Biología

Lagostomus maximus, llamada comúnmente vizcacha común, vizcacha de las llanuras, vizcacha de las pampas o vizcacha mora, es una especie de roedor de la familia Chinchillidae, la única viva del género Lagostomus. Es un roedor de hasta 60 cm de largo que habita en Sudamérica, desde el sur de Bolivia y Paraguay hasta el norte de la Patagonia argentina.Es de pelo abundante, cabeza grande, hocico abultado y chato por delante, bigotes largos y sedosos y orejas pequeñas. Generalmente, de pelaje gris en el lomo y blanco en el vientre. Dos franjas negras le atraviesan la cara. Sus patas son cortas, con dedos y uñas fuertes que le sirven para cavar la madriguera. La cola se desprende con facilidad, y esto la salva muchas veces de ser capturada. El peso y su dimensión corporal varía con edad, sexo, bondad climática, y zona. En promedio la cría nace con 180 g de peso. Un macho adulto pesa entre 4,5-7,5 kg, con un promedio de 5,5 kg; la hembra adulta entre 2,5-4,2 kg (promedio 3,5 kg).

Estado de conservación

Es intensamente capturada por los humanos por varias razones: para aprovechar su carne (especialmente en preparados “en escabeche”), para comercializar su piel en la industria peletera así como por considerársela pieza de caza deportiva.Pero la mayor causa de sus capturas es por la relación conflictiva que este roedor entabla con los productores agropecuarios. Al atacar los cultivos, fue declarada oficialmente plaga agrícola por el Ministerio de Agricultura de la Argentina en el año 1905 por el artículo 2 de la Ley de Defensa agrícola n°. 4863, reglamentada su aplicación por el decreto del 15 de octubre de 1907, determinándose que el combate a este animal sea obligatorio para todos los propietarios de campos.